Los adultos debemos expresar emociones
Los adultos debemos expresar emociones
No siempre somos conscientes de cómo afectan las emociones en nuestras respuestas. Una llamada de teléfono, una preocupación, un poco más de estrés del habitual o simplemente una necesidad de descansar pueden convertirse en un detonante, un estresor que hacen que la petición de un simple vaso de agua por alguno de nuestros hijos se convierta en algo difícil de gestionar. Pedir una segunda oportunidad para volver a responder nos permite entrenar el amor incondicional. “No me gusta como te he hablado, déjame que te vuelva a responder”